Presidente Evo Morales promulga Ley 1161 de Libertades Religiosas y de creencias espirituales

En el auditórium de la Casa Grande del Pueblo, el Presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, Evo Morales Ayma, promulgó la Ley 1161 de Libertades Religiosas, convocando a los miembros de todas las religiones a trabajar de manera conjunta en el fortalecimiento de la fe y la solución de temáticas de la sociedad.

De la ceremonia de promulgación participaron también el Ministro de Relaciones Exteriores, Diego Pary Rodríguez; el Ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana; la Presidenta de la Cámara de Senadores, Adriana Salvatierra; asambleístas nacionales, representantes de organizaciones religiosas y movimientos sociales.

El Presidente Morales, llamó a los profesantes religiosos, a trabajar de manera conjunta en la solución de temas sociales “para bien de todas y todos”, a tiempo de rememorar pasajes del tiempo de la colonia en que algunas religiones limitaban la equidad de género, desfavoreciendo a las mujeres, que “no tenían que ser más inteligentes que los varones, no tenían que tener más derechos que los varones. Y cómo se les castigaba, se les acusaba de herejes”, reflexionó.

Por su parte el Canciller de Estado, afirmó que la “construcción de la presente Ley, es resultado de un largo proceso, construido entre todas y todos”, donde los aportes compuestos de reflexiones, debates y discusiones espirituales, fortalecieron y nutrieron cada uno de los “14 artículos, dos disposiciones transitorias y una disposición final, que garantizan la libre profesión, difusión y enseñanza de la fe, además se reconoce al servidor religioso como un profesional de aporte a la sociedad boliviana”. 

La norma regula la otorgación de personalidades jurídicas a las organizaciones religiosas y tiene por objeto establecer un marco jurídico del ejercicio de la libertad religiosa y de creencias espirituales de acuerdo a sus cosmovisiones y el reconocimiento institucional de las organizaciones religiosas.

Juan Carlos Ballón, en representación de los amautas, yatiris y guías espirituales, aseveró, “nosotros como pueblos indígenas nos sentimos satisfechos de que nuestra espiritualidad, nuestra creencia, nuestras wak’as y nuestros sitios sagrados se respeten y estén protegidos por la Ley”, que por más de cinco siglos estuvo sometida y excluida, sin embargo, en este Gobierno, con la nueva Constitución son reconocidas, “aquí estamos los amautas, yatiris, guías espirituales que venimos ejerciendo el agradecimiento a la Pachamama, a nuestros Apus, a nuestros Achachilas”, recalcó el representante.

Todos nosotros, “estamos unidos por una causa, bendecir Bolivia, que los principios y valores dominen nuestra Nación para ser mejores ciudadanos, para que Bolivia sea conocida en esta batalla mundial, quedan muchas luchas: feminicidios, infanticidios y otros”, manifestó Alberto Salcedo, Anciano de EKLESIA, ahora “hemos dejado de ser invisibles, somos parte de esta preciosa Patria Bolivia”, remarcó.

El Presidente de la Asociación Nacional de Evangélicos de Bolivia, Pastor Munir Chiquie, manifestó que “la Ley 1161, pone fin al Estado confesional que había privilegiado a una sola confesión (la católica), y establece el Estado laico con la libertad de religión y de creencias espirituales sin injerencia del Estado en la religión, ni de la religión en el Estado”, a diez años de la promulgación de la actual Constitución.

El proceso de construcción de la presente Ley, es el producto de cuatro mesas de trabajo, que abordaron: generalidades de la ley, las religiones, las espiritualidades, y el convenio marco y tratamiento tributario. La ley manifiesta además la obligación de informar sobre las actividades administrativas, financieras, legales, sociales y religiosas o espirituales y prohíbe la distribución de los ingresos o el patrimonio entre los miembros.

“Bolivia hoy celebra. Es un día de liberación, es un día histórico, hoy, hay una libertad de conciencia plena respaldando los derechos y marcando las obligaciones de cada uno de nosotros que estamos en este país, en esta amada Bolivia para servir”, comprometió Salcedo, afirmando, “somos promotores de la paz, de la prosperidad, somos promotores del amor, eso tiene que permanecer en los corazones de cada uno de nosotros”.  

La presente Ley, determina los derechos y obligaciones de las organizaciones religiosas y de creencias espirituales, las cuales, en su ejercicio proveniente de la libertad religiosa de culto y creencias espirituales, tienen como límite el derecho de los demás.

El Canciller también destacó que, “la finalidad central de esta Ley, es reconocer y respetar la libertad de religión y de creencia espirituales, de acuerdo a sus cosmovisiones, de acuerdo al culto de conciencia y de pensamiento”.

Según la normativa, los ministerios de Relaciones Exteriores y de la Presidencia, tiene un plazo de 120 días calendario computable a partir de la publicación de la Ley para consolidar su reglamentación.

La Paz, 11 de abril de 2019.